Reseña justa

A pesar de su ubicación concurrida que impide dormir bien, el hotel brilla por su encanto histórico. Sin embargo, la falta de ascensor y el personal poco entrenado son serias preocupaciones. Sería recomendable que hicieran mejoras en la limpieza de áreas comunes y la calidad del servicio.

El hotel tiene una ubicación excelente cerca de

todo lo que necesitas. Las habitaciones son cómodas y limpias, aunque el ruido de la calle puede ser un problema. La atención del personal fue muy amable, lo que hizo que nuestra estancia fuera aún mejor.

la habitación fue un poco pequeña,, y la presión del agua en el baño fue un problema. pero la decoración era encantadora (me encantaron los detalles victorianos), el desayuno fue delicioso (sobre todo las tortillas) y el personal muy amable.

La estancia fue genial, sobre todo porque pudimos visitar el Tunbridge Wells Golf Club, donde jugamos una partida divertida en familia. Además, la limpieza y el servicio en el hotel fueron excepcionales, lo que contribuyó a una experiencia muy agradable con mi nieta.

Según mi mujer, sería ideal tener una zona de juegos para niños.

el desayuno se sirve en una terraza encantadora. el acceso a las habitaciones es complicado.

Este lugar me queda perfecto, tiene wi-fi, bar y un restaurante que ofrece un delicioso desayuno. Recuerdo que en mi primera estancia, el personal me ayudó a encontrar buenos lugares para ir de compras. Sin duda, volveré por un par de días.

Las salchichas de carne de Viena eran deliciosas y un gran punto a favor. La habitación, aunque un poco pequeña, tenía una decoración encantadora, pero la presión del agua en la ducha fue insuficiente, lo cual fue decepcionante. La atención del personal fue buena, pero la limpieza de las áreas comunes podría mejorar.